Índice
Registrarse
Conectarse
| Consideraciones Generales sobre Animales Exóticos: |
| Los animales exóticos no entrarían propiamente en la definición de mascotas o animales de compañía, pues a diferencia de éstos no llevan miles de años conviviendo ni compartiendo su vida y costumbres de forma doméstica junto a los humanos. Estos animales, si no se cuidan adecuadamente, pueden poner en especial situación de riesgo a la salud de su cuidador y la de su familia. Nunca debemos adquirir animales que no hayan sido criados en cautividad para tal fin, ya que de lo contrario, y en caso de animales procedentes del medio natural se les estará sometiendo, en primer lugar, a un cambio de hábitat particularmente estresante, y en segundo término, esto supone exponer a la familia a riesgos sanitarios innecesarios. Si el ejemplar pertenece a una especie protegida, se estará cometiendo un delito grave, tal y como indica la compañía Traffic, un programa conjunto de la WWF (Fondo Mundial para la Vida Salvaje) y la UICN (Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza), el cual vigila y controla el comercio de especies silvestres protegidas. |
| Quiero colaborar con el grupo WWF Barcelona (Spain) |
| En nuestros días, resulta sorprendente que cada vez sea más frecuente la adquisición de reptiles y otros animales exóticos como mascotas. En los últimos años se han introducido iguanas y otros reptiles (como tortugas de agua o de tierra), y hurones. En cualquier caso, debemos informarnos adecuadamente antes de adquirir cualquiera de estas especies para poder darles la mejor calidad de vida posible en sus nuevos hogares, y también reducir el riesgo sanitario asociado a “estas nuevas mascotas”. A este respecto, debemos tener en cuenta, que todos ellos pueden actuar como reservorios de Salmonella de origen animal, con aportación incluso de distintas cepas o serotipos, pasando a constituir un riesgo potencial de transmisión, en especial para niños, ancianos y personas enfermas o con deficiente estado inmunitario. Hay muchas especies exóticas o salvajes la tenencia de las cuales está prohibida o sujeta a la autorización pertinente o certificado Cites (siglas en inglés de “The Convention on International Trade in Endangered Species of Wild Fauna and Flora” o Convenio sobre el Comercio Internacional de Especies de Fauna y Flora Salvaje Amenazadas). A pesar de esto, muchas familias tienen desde hace años alguno de estos animales en su domicilio e incluso se ha observado una mayor proliferación de algunos de ellos (tortugas, cotorras, etc.) en ciertas zonas rurales o urbanas, lo que los hace susceptibles de ser atrapados o llegar heridos a algún parque o jardín. Es necesario asesorarse bien sobre el manejo y alimentación de estos animales para que la experiencia sea gratificante para el animal y su cuidador. Cuando no podamos tener alguno de estos animales debemos contactar con nuestro municipio para que nos orienten acerca del lugar más adecuado de nuestra comunidad donde dirigirnos para llevar al animal. En cualquier caso, nunca debemos coger un animal silvestre del medio natural para tenerlo como mascota, ya que además de estar prohibido, puede suponer un riesgo sanitario y el animal posiblemente fallecerá por el estrés de vivir en cautividad. |
 |
| Recomendaciones Básicas para el cuidado de Loros y similares: |
| Alimentación: Estos animales requieren muchas y variadas vitaminas y minerales, por la cual su dieta deber ser básicamente a base de frutas y verduras como naranjas, peras, manzanas, cerezas, ciruelas, nueces, zanahorias, avellanas, espinacas, acelgas, lechuga, cereales, etc. Su alimentación, deber ser, por tanto, fresca, variada, nutritiva y equilibrada. Existen también dietas comerciales especialmente formuladas para ellos, aunque deben estar acostumbrados a ingerirlas desde pequeños para que las acepten bien. Es importante que no se devuelvan al comedero los trozos de comida que hayan podido caer fuera, para evitar su contaminación por las deposiciones. Temperatura y ambiente: Los loros, y en general, los animales de su familia (las psitácidas), cuando se encuentran en su hábitat natural, viven y crían mejor si tienen árboles donde esconderse, pudiéndose adaptar a vivir indistintamente tanto en ambientes lluviosos como soleados. Limpieza: Necesitan tener diferentes fuentes de agua limpia a disposición por si desean beber o darse un baño. Educación: No es recomendable dejar que los niños se pongan un loro en la espalda, para evitar el riesgo que les pique en la cara. Estos animales puede tener en ciertas ocasiones reacciones inesperadas. No son animales apropiados para niños inferiores a 14 años. En su hábitat natural son animales potencialmente depredados pero no depredadores, lo que los convierte en animales bastante desconfiados, especialmente ante situaciones o personas desconocidas. Compañía: Nunca debemos comprar un loro o similar como animal de compañía fruto de un impulso irreflexivo, especialmente si no estamos verdaderamente dispuestos a ofrecerle todas las atenciones y protección necesarias. Hay que tener en cuenta que son animales que les gusta hacer bullicio, son traviesos, sorprendentes, divertidos, inteligentes, activos, y con un sentido del humor interminable, además de ser también un poco pícaros y maliciosos. También son exigentes en cuanto al afecto de sus amos y un poco celosos. Estas mascotas exigen una buena dedicación, trabajo, paciencia y mucha sensibilidad. Control sanitario de loros y similares: Sólo debemos adquirir loros que hayan nacido en cautividad, por las garantías sanitarias que esto ofrece. Los loros pueden transmitirnos la Chlamydia Psittaci, un agente bacteriano responsable de la psitacosi, una enfermedad respiratoria que puede resultar grave, sobretodo para personas inmunodeprimidas (niños, ancianos, enfermos crónicos, ...). Por esta razón, conviene que la limpieza de su hábitat o jaula la realize un adulto responsable específicos y que disponga de un buen estado inmunitario y que se utilizen productos específicos bajo recomendación veterinaria. |
 |
| Recomendaciones Básicas para el cuidado de Peces: |
| Los peces de acuario son mascotas que aportan belleza y recreación a nuestro entorno, pero que requieren la atención y protección diaria de un adulto con buen estado inmunitatio. Para tenerlos felices, hay que contar con un recipiente adecuado que disponga de un sistema de oxigenación, otro de regulación de la temperatura, y también de alimentos especiales de acuerdo al tipo y número de ejemplares. La limpieza periódica y específica es un requisito indispensable para la viabilidad de los peces y para la seguridad de los propietarios. El número de ejemplares nunca debe sobrepasar el límite de capacidad de nuestro acuario. Estas consideraciones deben ser meditadas antes de adquirir este tipo de animales. Para mayor información, asegúrese de consultar sobre su cuidado a un profesional o veterinario cualificado. |
 |
| Recomendaciones Básicas para el cuidado de Tortugas y otros Reptiles: |
| Situación similar a los peces se presenta con el cuidado de tortugas, especialmente, de agua. Los hábitats o recipientes donde alberguemos estos animales pueden convertirse en un “caldo de cultivo” para algunas bacterias, por lo que estos estanques, piscinas, acuarios o terrarios pueden suponer un riesgo para la salud de las personas, si no se limpian o manipulan con la debida precaución. Entre las bacterias que pueden estar presentes en los acuarios o terrarios encontramos la Salmonella sp., y en relación específica a las tortugas Mycobacterium marinum. Por todo esto, es conveniente que la responsabilidad de estos acuarios, estanques o terrarios recaiga en adultos capacitados y con un buen estado de salud. Antes de adquirir cualquiera de estos animales es conveniente contar con la asesoría de un profesional cualificado para conocer en detalle el manejo y las condiciones de alimentación adecuadas a cada especie. |
 |
| Recomendaciones Básicas para el cuidado de Hamsters, Roedores, Conejos y Hurones: |
| Los conejos, hurones, hámsters y otros roedores son mascotas hoy en día bastante frecuentes en nuestros hogares, cuya adquisición ha aumentado también en los últimos años. Es conveniente, como con todos los animales, consultar con un veterinario cualificado antes de adquirir uno de estos animales, para poder asesorarse sobre los requisitos de mantenimiento (lugar de adquisición, hábitat, limpieza, alimentación,...), así como de los riesgos potenciales que comportaría tener estos animales mal cuidados en nuestro domicilio. Ante cualquier mordisco (sobretodo si se trata de un niño), conviene consultar a un médico para evaluar las heridas, y si requiere o no la inoculación de algún suero antitetánico u otra medicación necesaria. La limpieza de la jaula y de las deposiciones deberá realizarla un adulto inmunocompetente, y esto es algo a tener en cuenta antes de comprar a nuestros hijos cualquiera de estos animales. Estos animales requieren dietas especiales, que van a más allá de la administración de un pienso comercial, como por ejemplo: objetos para desgastar sus incisivos, fibra (alfalfa o heno) en el caso de los conejos y cobayas, vegetales y semillas, frutas variadas, etc. En el caso particular de las cobayas, debemos administrarles una fuente de vitamina C con la dieta ya que a diferencia de otras especies no pueden sintetizarla en su organismo. Hay que tener en cuenta, que todos estos animales si no tienen una buena higiene y desinfección de su hábitat o jaulas, pueden ser atacados por diferentes hongos, bacterias o parásitos, y padecer problemas de piel, respiratorios, diarreas, etc. En cuanto a los conejos y hurones conviene que reciban periódicamente vacunación en contra de la pasteurelosis, fiebre hemorrágica y mixomatosis (en los primeros), y el moquillo y la rabia (en los segundos). También hay que considerar (sobretodo las ratas, ratones, cobayas, etc.) que son animales que pueden criar con relativa facilidad en cautividad, y hay que tener en cuenta el sexo de los animales que adquiramos, sobretodo porque podemos encontrarnos con camadas que no podamos cuidar adecuadamente. |
